No lo puedo remediar. Siempre miro la foto en la que muestra su rostro. Y es por culpa de esos ojos oscuros que dicen tanto. Aún en una simple foto en blanco y negro. ¡Sus fotos no necesitan color! las ilumina con su belleza, con el pelo negro cayéndole suavemente sobre la frente. Con su sonrisa pensativa y su rostro dulce.
No puedo evitarlo. Sigues dándome el placer que ofrece la belleza a los ojos de alguien que la sepa apreciar. Pero eso no evita que lo diga, que lo grite para que todos los sepan: mantengo tu foto guardada en mi ordenador sólo por ver tu rostro. Por que te quiero... Audrey... lástima que estés muerta.
1 comentario:
Pa bonito el niño que está debajo, que, casualidades de la vida me está dando unas cuantas patadas en la barriga...
Además de tener la cara más dulce del cine por siempre jamás, también era una persona de gran corazón y muy solidaria, entregada hasta el último dia de su vida.
Suerte que estés en los cielos que si no te arranco los ojos...
Miguel, ya hablaremos.
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