
En los juegos de unir los puntos, éstos están numerados y sabes cómo unirlos. En la vida se van uniendo solos, pero sólo le encuentras el sentido después de un tiempo. Durante mucho tiempo sólo ves puntos, algunos felices y otros dolorosos, pero al final siempre cobran sentido. El problema es que no sabemos cuándo va a ser.
Puede que el “punto” en el que estás ahora sea de decepción porque no te va bien en el trabajo. Puede que sea de agobio o preocupación por el presente o el futuro. Puede que sea un punto por amor o desamor o puede que sea de duda. Sea lo que sea, es un punto que acabará por cobrar sentido, pero que tendrá el valor que le aportes ahora con tu actuación.
Si, yo creo que los puntos no son estáticos, no son inmutables. Están ahí, pero terminarán por ser lo que hagamos de ellos. En el futuro cobrarán sentido y les veremos la utilidad, pero por ahora acabarán por ser lo que hagamos de ellos. En el caso de Steve Jobs, él no se abandonó cuando le echaron de su propia empresa. Creó otras dos con las que aportó tanto valor que, sin proponérselo, volvió a lo grande. El punto estaba allí, pero él hizo que fuese lo que fue.
¿Verdad que hay puntos para unir en tu vida? Ahora puedes unir algunos del pasado, pero estás creando otros nuevos. Hazlo con pasión, en la vida, y en el trabajo.
1 comentario:
¡¡Qué bonito sería poder ir uniendo los puntos estupendos del pasado con los buenos del presente!!... Formar una línea recta con puntitos llenos de luz y suprimir los negros. Lo malo es que siempre se tuerce alguno...
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